Administrar el tiempo que tu hijo pasa frente a la pantalla es más fácil cuando se trata de "hacer lo que hago"

Administrar el tiempo que tu hijo pasa frente a la pantalla es más fácil cuando se trata de "hacer lo que hago"

Todos sabemos que las acciones hablan más que las palabras y que los padres son modelos sólidos para sus hijos. Esto significa que si deseas que tu hijo tenga un relación sana con las pantallas, necesitas crear tus propios hábitos saludables. Pero, ¿cómo luchas contra esa atracción constante hacia tus pantallas? Incorpora poco cada cambio antes de pasar al siguiente. El lado positivo es que, como resultado, su vida será más rica.

Siete formas de cambiar tus hábitos frente a la pantalla de tu familia:

1. Mira a tu hijo cuando le hables. Beneficio: prestar atención positiva a tu hijo lo ayuda a sentirse más seguro y valorado.
2. Guarda la pantalla durante las visitas al parque, los viajes al supermercado u otros eventos de rutina. Beneficio: observar el mundo que te rodea y sentir curiosidad por él se convertirá en una hábito saludable para tu hijo.
3. Deja de usar la pantalla una hora antes de que tu hijo se vaya a dormir. Beneficio: establecer un horario crea expectativas en lugar de sorpresas cuando el tiempo frente a la pantalla es limitado.
4. Compartir tiempo de calidad sin pantalla jugando juntos un juego en familia al menos una vez a la semana. Beneficio: Los juegos en familia les permiten crear lazos afectivos, establecer una rutina y ayudar a su hijo a desarrollar habilidades sociales.
5. Comparta un tiempo de calidad frente a la pantalla leyendo un libro o jugando juntos a un juego educativo en línea. Beneficio: compartir experiencias creativas, estimulantes y apropiadas para su edad con tu hijo lo guía hacia tiempo de pantalla de alta calidad.
6. Silencia el teléfono, pausa el televisor o pon la pantalla en reposo mientras interactúas con tu hijo. Beneficio: Eliminar la tentación de revisar constantemente la pantalla te ayuda a priorizar a tu hijo.
7. Planifica una excursión una vez al mes a un museo, galería de arte, zoológico, concierto, evento deportivo u otro lugar que estimule la curiosidad. Beneficio: explorar una variedad de experiencias de la vida real con tu hijo no solo creará recuerdos de la infancia, sino que también podría despertar la pasión de tu hijo.

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